Durante el embarazo, el dolor de espalda y las molestias no son
infrecuentes. Más del 50% de las futuras madres experimentan algún tipo de
dolor de espalda, especialmente a medida que el bebé se desarrolla.
¿Cuáles son las causas del dolor de espalda?:
Según las estadísticas, aproximadamente el 60-70% de las mujeres
padecen trastornos de la columna vertebral. Estas condiciones pueden ser
degenerativas, inflamatorias, traumáticas y tumorales. Aunque con mayor
frecuencia se desconocen las causas del dolor de espalda, el 25% está
relacionado con la articulación sacroilíaca; ubicado entre la columna lumbar y
la pelvis, el área en la que se siente el impacto en la columna debido a la
transferencia de peso que tiene lugar entre la columna vertebral, la pelvis y
las piernas.
En el caso de las mujeres embarazadas, al comienzo del embarazo, el
dolor es causado por el impacto en el área lumbar. Después de 6 meses de
embarazo, debido a la transferencia de peso, además de aumentar el nivel de
estrógenos y el depósito de reginplasma, el dolor se convierte en el área
sacroilíaca. Estos cambios generan relajación de los ligamentos, por lo tanto,
mayor movilidad de las articulaciones.
Para las mujeres que sufren de degeneración de los discos lumbares
antes del embarazo, las posibilidades de desarrollar una hernia de disco son
mucho mayores. Para detectar una hernia de disco, es importante tener en cuenta
que el dolor se sentirá tanto en la columna vertebral como en el pie, pero la
función intestinal y el funcionamiento normal de la vejiga no se verán
afectados. Además, no habrá déficit motor en el área del pie.
¿Cómo ayuda la quiropráctica
en el tratamiento del dolor de espalda y cuáles son los beneficios?
El dolor de espalda durante el embarazo es extremadamente común. En
muchos países la quiropráctica es la primera opción para las mujeres
embarazadas porque no implica tratamiento farmacológico o procedimientos
invasivos. La quiropráctica se enfoca en anomalías o cambios que ocurren en la
estructura física y cómo pueden impactar negativamente el sistema nervioso y
otras estructuras corporales.
Cuando una mujer embarazada sufre un desequilibrio físico, esto
puede causar dolor y minimizar las funciones corporales, las técnicas
quiroprácticas pueden corregir esto. Al mismo tiempo, el cuerpo durante el
embarazo sufre cambios muy rápidos. Ganar peso en muy poco tiempo puede
provocar trastornos estructurales, hinchazón de las piernas, cadera, pélvica,
dolor de cuello y espalda, migrañas, ciática o insomnio, siendo solo algunos de
ellos. En estos casos, generalmente se recomiendan analgésicos que, sin
embargo, no tienen el mismo efecto que la quiropráctica.
El embarazo también es uno de los momentos más importantes en la
vida de una mujer, y el parto y el parto son extremadamente difíciles, tanto
física como mentalmente. La quiropráctica mejora la movilidad del embarazo y
facilita el parto, y debido a que actúa neurológicamente, no solo es
beneficiosa para la madre, sino también para el bebé. Debemos recordar que para
el feto en desarrollo, el cuerpo de la madre es su hogar.
La quiropráctica durante el embarazo es extremadamente segura, pero
lo más importante es llamar a un médico acreditado. De lo contrario, los
riesgos asociados con la quiropráctica son mucho más bajos que el tratamiento
farmacológico o la cirugía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario